Novelas sobre la Grecia clásica
Empecemos por las novelas dedicadas a los mitos griegos. Teseo ha sido el protagonista de dos novelas, bajo el nombre de El toro del mar, de Mary Renault: El rey debe morir y Teseo, rey de Atenas. Para una primera aproximación a los mitos griegos, recomendable el libro de Robert Graves, Dioses y heroes de la antigua grecia, y la novela del mismo autor, El vellocino de oro (1944). Layos, la historia de un mito griego, de Josep Asensi, acerca del mito fundacional de Tebas y la maldición de Edipo. Orestes el legislador, de Alicia Ferrer, acerca del mítico rey de Micenas. Las luchas entre los olímpicos y los gigantes: Señores del Olimpo, de Javier Negrete.
La guerra de Troya que narró, supuestamente, Homero en la Iliada, su propio autor, así como los mitos griegos, han sido tomados para componer un gran número de novelas: Laura Riding, Final troyano (1937); Crescenzo, Helena, Helena, amor mio (1991); McCullough, La canción de Troya (1998); Robert Graves, La Guerra de Troya (1962), y de este mismo autor: La hija de Homero (1955). Antonio Prieto, El ciego de Quios (1996).Gisbert Haefs, Troya (1999). Hilary Bayle, Casandra, princesa de Troya (1996).
Y sobre el mundo micénico: Homero y los reinos del mar, de José Ferrer.También, basada en el época de la guerra de Troya, y los aqueos como protagonistas, la novela de Manfredi, La conjura de las reinas (1985).
Acerca de las guerras médicas: Salamina, de Javier Negrete; El agua y la tierra, de Julio Murillo Llerda; Adios al Rey, de Jill Paton Walsh; Maratón, de Christian Cameron. Las Termópilas, de William Golding, misma batalla en la que se basa la novela de Steven Pressfield, Puertas de fuego.
La época dorada de Atenas y la guerra del Peloponeso ha sido otro de los temas más recurrentes en la novela de historia griega. Mary Renault, Alexias de Atenas (en origen titulada El último vino) y La máscara de Apolo. Vientos de Guerra, de Steven Pressfield. Y de uno de los atenienses más prestigiosos, Pericles el Ateniense (1963), de Rex Warner. A finales del siglo V a.C., en el momento en que se restablece la democracia tras la caída de los Treinta Tiranos, La conjura de Atenas, de José Alcedo. Sobre la historia de Atenas en general: Manfredi, Akrópolis (2000).
Para el mundo espartano, también del mismo autor: Talos de Esparta (1986), así como Hijo de Heracles, de Teo Palacios, e Hijos de Esparta, de Nicholas Nicastro. Y acerca de la vida de un espartano, Brasidias: Bajo la Égida de Ártemis, de Jon Edward Martin. La rivalidad entre las dos principales ciudades griegas: Esparta y Atenas, se puede observar bien en: El hombre de Esparta, de Antonio Penadés.
Sobre Jenofonte y los Diez Mil, la novela de Curtis Ford: La odisea de los diez mil. Y de Manfredi: El ejército perdido.
Y si todos pensamos en la democracia ateniense, la tiranía fue algo también usual en las polis griegas. Sobre la de Siracusa destaca la novela de Manfredi: El tirano.
Alejandro Magno es uno de los personajes que más novelas han inpirado: Roger Caratini, Alejandro Magno. Dos novelas de Gisbert Haefs, Alejandro, el unificador de Grecia (1992) Alejandro el conquistador de un imperio (1993); así como tres novelas de Mary Renault: Fuego del paraiso (1969) donde se narra la infancia de Alejandro; El muchacho persa (1972) donde aparece Alejandro ya como conquistador de Persia; y una biografía novelada, Alejandro Magno (1975). De la misma autora: Juegos funerarios (1981) que trata de los sucesores, los Diádocos, de Alejandro. Destacan también la trilogía de Manfredi: Alexándros, el hijo del sueño (1998); Alexándros, las arenas de Amón (1998); Alexándros, el confín del mundo (1998). Alejandro Magno, Imperio de ceniza, de Nicholas Nicastro; El secreto del oráculo, José Ángel Mañas; La campaña Afgana, de Steven Pressfield, esta última con un protagonista distinto a Alejandro. y de Filipo II, padre de Alejandro: El macedonio, de Nicholas Guild. Aunque no se trata exactamente de una novela, La tumba de Alejandro, de Valerio Manfredi, acerca del destino de los restos del rey macedonio.
Para alguno de los filosofos más conocidos también existen algunas novelas, empezando por Sócrates: Ciudadano Sócrates, de Solana Dueso; Las dos muertes de Sócrates, de García-Valiño; Sócrates, de Benigno Morilla; Asesinato en el jardín de Sócrates, de Sascha Berst; Mi amigo Sócrates, de Josef Vital-Kopp. En menor medida Aristóteles: El maestro de Alejandro, de Annabel Lyon; El testamento de Aristóteles, de Alfredo Marcos; Aristóteles y los secretos de la vida, de Margaret Doody. Finalmente, sobre Platón: La séptima carta, de Vintila Horia.
Acerca del rey Pirro: Pirro. El amanecer del Águila, de Luís Fernando Ángel Cuervo, que será una tetralogía.
Como protagonista la conocida Safo, la novela de Peter Green, Safo de Lesbos. La sonrisa de Afrodita. En la novela de Solana Dueso, La malva y el asfódelo, también es una mujer el personaje principal, esta vez Aspasia de Mileto. Otras tantas novelas basadas en el mundo griego: La esclava de azul, de Joaquín Borrell; y del mismo autor La lágrima de Atenea; La increible historia del Papiro de Artemidoro, de Ernesto Ferrero; La canción de la cabra, de Frank Yerby. Destacaría la trilogía de Latro, de Gene Wolfe: Soldado de la niebla, Soldado de Areté, Soldado de Sidón.